Era solo un sueño

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2021 Hyundai Elantra Review: Casi genial

El veredicto: El rediseñado sedán compacto Hyundai Elantra 2021 sería excelente en lugar de bueno si no fuera por sus materiales de cabina deslucidos. Si el desarrollo de un coche era un maratón, el Hyundai no corrió el último kilómetro.

Contra la competencia: Para ser un sedán compacto para el mercado masivo, el Elantra combina una conducción líder en su clase con un montón de tecnología fácil de usar. Desgraciadamente, su interior de bajo alquiler pesa mucho.

Para el 2021, el Hyundai Elantra sedán viene en los niveles de equipamiento SE, SEL y Limited, todos con un motor de 2.0 litros y cuatro cilindros. (El hatchback Elantra GT ha sido descontinuado.) El primer Elantra Híbrido, mientras tanto, empareja un cuatro cilindros más pequeño con asistencia eléctrica; viene en los niveles de equipamiento SEL y Limited. Por último, el Elantra N Line tiene un cuatro cilindros con turbocompresor y la única transmisión manual de la línea. (Obsérvese que un Elantra de mayor rendimiento, llamado simplemente la N, sin la «Línea», sigue en funcionamiento a fecha de este escrito). Todas las demás variantes tienen un automático, que también está disponible en la Línea N. Amontonen todo el grupo actual, o comparen el Elantra de 2020 y 2021.

Evaluamos un SEL en el transcurso de una semana y también hicimos breves recorridos en el Híbrido Limitado y en la Línea N de cambio de marchas.

SE, SEL, Limited: Conducción refinada
Una confusa pero antigua realidad en nuestra reciente comparación entre el Honda Civic, el Nissan Sentra y el Toyota Corolla fue el equilibrio entre la calidad de la conducción y la manejabilidad de las chuletas. El Hyundai eleva ambos mejor que cualquier coche de ese trío, así como la mayoría de los otros sedanes compactos.

A pesar del eje trasero de viga de torsión – una configuración que ahorra costes frente a las suspensiones traseras independientes utilizadas por algunos rivales, incluyendo el Civic y el Corolla – el Elantra se conduce de forma impresionante. Aparte de cierta inquietud durante los baches de media esquina, el control de la carrocería se siente impresionante para un sedán compacto del mercado masivo. Lo mismo ocurre con la absorción de impactos: La suspensión lleva cubiertas de alcantarillado y pavimento con surcos con un grado de sofisticación que recuerda al de un coche más grande o caro, y eso es con las ruedas opcionales de 17 pulgadas y los neumáticos P225/45R17 de nuestro modelo SEL. Con diámetros de rueda disponibles que van de 15 a 18 pulgadas, es posible que las versiones de menor tamaño del Elantra sean aún más cómodas. (En igualdad de condiciones, las ruedas más grandes generalmente disminuyen la calidad del paseo).

Felicitaciones, también, por los reflejos del Elantra. Si lo lanzas a una esquina, el morro se empuja pronto, pero la dirección se siente tan rápida como la del Civic, que sigue siendo uno de los coches más manejables de la clase, con menos vaguedad del Elantra saliente. El volante rara vez se siente nervioso en el centro, incluso a altas velocidades, y el balanceo de la carrocería está bien contenido a través de las curvas.

Bajo el capó se encuentra el motor de 2,0 litros y cuatro cilindros del año pasado (147 caballos de fuerza, 132 libras-pie de par), que funciona con un ciclo Atkinson más eficiente; se ha perdido el Eco trim de la generación anterior y su turbo de 1,4 litros y cuatro cilindros. El de 2,0 litros tiene una potencia razonable por encima de las 3.000 rpm más o menos, y la transmisión automática continuamente variable de Hyundai es un socio motivado para conseguirlo. Las revoluciones suben enérgicamente desde una parada, y si necesitas más potencia cuando ya estás en movimiento, la CVT sube las rpm del motor lo suficientemente rápido como para imitar una reducción de la marcha de una automática convencional. El 2021 Elantra no es particularmente rápido, pero hace un buen trabajo con lo que tiene para ofrecer.